Mikko Hypponen: "Los expertos en seguridad informática ya no protegen computadoras, sino a toda la Sociedad"

Más allá de intuir que Estados Unidos o Rusia van por delante, en la nueva carrera armamentística desconocemos por completo la capacidad ofensiva de los contendientes. Desgraciadamente, los recursos militares ya no se podrán contabilizar como los soldados, los tanques o los drones. Tampoco bastará con atemorizar al resto de países con la mera posesión del arsenal, como sucedía con el nuclear. Habrá que exhibir la fuerza.
“ La niebla de la ciberguerra” es la expresión que ha utilizado el prestigioso experto en seguridad Mikko Hypponen para explicar por qué el conflicto que se avecina es completamente diferente a todos los que se han vivido hasta ahora. “El poder de las ciberarmas no está en la disuasión, el poder de las ciberarmas está realmente en usarlas”, ha asegurado el investigador en el congreso de seguridad Rooted CON. “Las ciberarmas son efectivas, asequibles y fáciles de negar, una gran combinación”.
Hypponen es uno de los expertos en seguridad informática más reputados del mundo. Lo avala un cuarto de siglo trabajando en el sector. Responsable de investigación de la compañía finlandesa F-Secure, ha luchado contra el ‘malware’ prácticamente desde la aparición de los primeros virus para ordenador. Además de proteger a empresas de la talla de Twitter, Hypponen ha ayudado a resolver casos de cibercrimen a autoridades de Estados Unidos, Europa y Asia y evangeliza sobre los futuros desafíos de la ciberseguridad
Hypponen dice “no tener problemas” con que los gobiernos utilicen tecnologías ofensivas para investigar delitos, pero sí reclama que los ciudadanos exijan “transparencia y responsabilidad”. “Tenemos que demandar transparencia en la fuerza ciberofensiva, por ejemplo, con una publicación estadística de aplicación de la ley”, reclama el experto.
También ha mostrado su preocupación por los peligrosos ciberatacantes del futuro: los terroristas. A diferencia de los actuales ('hacktivistas', ciberdelincuentes y gobiernos), podrán realizar ciberataques “que no tengan sentido”, más peligrosos que los actuales. ¿Qué ocurriría si, por ejemplo, difundieran una suerte de Stuxnet modificado que infectara a las fábricas de forma aleatoria?
La futura amenaza ya preocupa a Estados Unidos: en 2015, uno de sus drones asesinó al entonces líder de los ciberdelincuentes del ISIS. Aunque este experto, que ha seguido la pista a los grupos terroristas, sostiene que “el Estado Islámico no tiene una buena capacidad para lanzar ciberataques”, sí cree que el ciberterrorismo será un problema en el futuro. “No está mejorando, está empeorando. Espero que nunca tengamos que ver ciberterrorismo, pero me temo que lo veremos”, defiende Hypponen.
La red de bots Mirai, propagada a través de dispositivos conectados a la internet de las cosas, estuvo detrás de un ataque de denegación de servicio (DDOS) que dejó sin internet a gran parte del territorio estadounidense hace unos meses. “Hablamos con un montón de gente que había activado la ‘botnet’ Mirai y no les preocupaba porque su dispositivo todavía funcionaba”, destaca Hypponen.
Por eso, el analista finlandés considera que ni usuarios ni gobiernos están todavía concienciados de los peligros de los dispositivos conectados. “A través de internet los criminales podían alcanzar todos los ordenadores, a través del internet de las cosas pueden alcanzar todo. El internet de las cosas está convirtiendo el mundo en una enorme máquina conectada a internet”.
“La gente aprenderá cuando vayan a sus coches y no arranquen porque haya una nota de un ‘ransomware’ [un ‘software’ malicioso que secuestra el dispositivo infectado] y tengas que pagar un bitcóin para llevarte tu coche”, augura Hypponen. “Veremos a los troyanos de ‘ransomware’ trasladarse de los ordenadores a la internet de las cosas”.
Proteger nuestra privacidad ‘online’ es otra de las inquietudes de Hypponen: “Al igual que el petróleo nos trajo prosperidad y problemas, los datos nos traerán prosperidad y problemas”. Un nuevo desafío al que tendrán que enfrentarse los expertos en seguridad. De ahí que este investigador haya alertado a los asistentes de la Rooted CON de su nuevo rol: “Vuestro trabajo no es proteger a los ordenadores, vuestro trabajo a partir de hoy es proteger a la sociedad (...) Tenemos probablemente una responsabilidad mayor de lo que nunca hubiéramos imaginado”.
“Si alguien me hubiera dicho hace 25 años que todo iba a funcionar con ordenadores que tendríamos que proteger, no lo hubiera creído. Si alguien me hubiera dicho hace 25 años que los gobiernos ejecutarían ‘malware’, no lo hubiera creído. Si alguien me hubiera dicho hace 25 años que los grupos terroristas estarían interesados en el ciberterrorismo, no lo habría creído”, enumera este célebre investigador.
¿Cómo prevenirse ante caídas en la Nube como AWS?

La caída temporal de AWS del pasado martes puso en evidencia la capacidad de muchas empresas para seguir operando si se interrumpen los servicios web. ¿Estamos listos para un eventual apagón de la nube?
Los teléfonos de los departamentos de TI de muchas empresas echaban humo el pasado martes. Páginas web caídas, ecommerce innacesibles… Amazon Web Services (AWS) fue responsable de este apagón, ya que sus servidores S3 (Simple Storage Services) comenzaron a registrar errores, afectando a los sitios y servicios web de empresas de todo el mundo.
El caos se extendió en toda la red, afectando a páginas de las administraciones, portales de comercio electrónico, compañías de servicios tecnológicos, etc. Y esto se traduce en importantes pérdidas económicas, afectando incluso a la reputación de las compañías. Pero de las crisis también se aprende y la caída de la nube de Amazon debe servir para hacer una reflexión
Como explica César Funes, Technical Partner Enablement Manager EMEA South Region de Commvault, “podemos extraer una lección importante: es vital saber dónde vive nuestra información y con qué rapidez se pueden recuperar los datos de negocio”. Así pues, apunta algunas claves para poder minimizar los riesgos ante situaciones como ésta.
En primer lugar, recomienda administrar los datos por región. Si falla el servicio en un área, hay que saber dónde están localizados los datos. Hay empresas que han descubierto dónde se ubican su información a raíz de la caída de AWS. “Se necesita un panel que muestre rápidamente qué datos se ven afectados por una interrupción, lo que permitirá crear un informe rápido y tener las respuestas antes de que el CIO llame”, afirma Funes.
Además, si los datos están en una región determinada, recomienda tener una copia de seguridad completa en otra, con el fin de recuperarlos rápidamente si hay una interrupción en aquella. Así se garantiza la posibilidad de seguir operando. “El backup es fundamental. Los datos y servicios críticos nativos de la nube deben garantizar que las copias de seguridad estén programadas en/a través/desde la nube para que sus datos estén disponibles. El backup automatizado, y la capacidad de verificarlo, harán que su vida sea mucho menos estresante”, declara Funes.
También advierte que se debe tener prevista la manera de recuperar la información para reanudar el servicio cuanto antes. “¿Qué pasa si todos sus datos están en formato Amazon AMI y nuestra infraestructura local es Microsoft Hyper-V o VMware? ¿Cómo se cambia el formato de los datos para hacerlos utilizables? Se necesita portabilidad para mover datos entre ubicaciones y entre plataformas, una flexibilidad que va más allá de lo que las herramientas nativas de la nube pueden ofrecer hoy.
Si un origen no está disponible, se debe habilitar la recuperación entre diferentes sitios e hipervisores. Si el sitio original no está disponible, se necesita flexibilidad para restaurar esos datos localmente, en otra región de AWS, en Microsoft Azure, en Oracle Cloud o en otros”, especifica.
Mujeres en Tecnología: ¡Vamos por más!

Para quienes estamos en el mundo IT hace un largo tiempo, el éxito de la película “Hidden Figures”, que rescata el aporte fundamental de 5 científicas norteamericanas para que la NASA llegue a la luna, es un hecho que nos brinda un renovado impulso para que más mujeres se incorporen al fascinante mundo de la Tecnología.
El aporte femenino a la comunidad científica es una historia plagada de éxitos que merece ser reescrita y sacarle el polvillo que el paso del tiempo cubrió. En este sentido, todas las iniciativas a nivel mundial que se llevan a cabo en esta dirección, recurren al pasado para mostrar empíricamente que aunque no la veíamos, la mujer siempre estuvo ahí.
No se trata de contraponer el aporte o la visión de varones vs mujeres, sino todo lo contrario: destacar como ambos sexos contribuyeron, de forma complementaria y a lo largo del tiempo, para mejorar la calidad de vida de toda la población mundial.
Ada Lovelace, Frances Allen, Grace Murray, Lynn Conway, Evelyn Berezin, Jude Milhon, Hedy Lamarr; fueron algunas de las figuras históricas que hicieron posible la informática tal como la conocemos hoy. (Ver Nota)
Rebeca de la Vega, gerente regional de Responsabilidad Social de Cisco, dijo en el último evento llamado “Cisco Live!” que América Latina vive “la tormenta perfecta” para que más mujeres se animen a entrar al mundo IT e inicien su carrera profesional, dado que es una profesión que permite balancear perfectamente la vida privada y laboral (trabajando a distancia por ejemplo).
Desde nuestra Directora Ejecutiva, Graciela García Costero, hasta personal de todas las áreas, en Fundación Proydesa celebramos y estimulamos la participación de mujeres en el ámbito educativo-tecnológico, por eso entrevistamos a nuestras alumnas y destacamos notas alegóricas en nuestra página.
La nota más vista en la historia de nuestro portal fue sobre la programadora de Redes Neuronales premiada por Google y recibida por el entonces presidente Obama, Brittany Wenger. Nosotros creemos que en nuestro país puede haber muchas Brittany´s si se brindan las oportunidades de capacitación adecuadas. (Ver nota)
De nuestra parte, aportamos nuestro granito de arena para recibir a todas las mujeres que quieran iniciarse en el mundo IT o potenciar su futuro laboral.
A todas ellas, hoy les decimos FELIZ DÍA

